lunes, 4 de febrero de 2013

455x10 minutos

El día 2 de febrero cumplí quince meses, o lo que es lo mismo, unos 455 días seguidos corriendo al menos 10 minutos al día. Exactamente, desde el día 2 de noviembre de 2011. A decir verdad, hace ya muchísimo tiempo que no me supone ningún esfuerzo ponerme las zapatillas y salir a correr.

Algunos días, si acaso, me ha dado un poco de pereza, bien porque hacía viento, bien porque llovía, bien porque, entre una cosa y otra, se me había hecho demasiado tarde. Entonces aguardaba hasta última hora para ir directo de la ducha a la cama.

Durante estos 15 meses he corrido en todo tipo de sitios, y casi a cualquier hora y en cualquier condición meteorológica.

Descubrí en junio que en Moscú es preferible correr por la mañana o a primera hora de la tarde, ya que a última hora se forman intensas tormentas que descargan agua durante horas.

Recorrí a finales de julio la playa de Omaha a primerísima hora de la mañana, y después dejé las zapatillas y la camiseta en la orilla y me dí un baño, absorto en una orilla y en unas arenas en las que dejaron su vida tantos soldados.

Me cayó un chaparrón impresionante junto a la playa de Utah, justo al día siguiente.

Correr me ha mantenido vivo. Incluso en aquellos momentos en los que no tenía fuerzas para hacer nada más, me calcé las zapatillas y salí a rodar un par de kilómetro y medio. He sumado en este tiempo, al menos, 1100 kilómetros. Por supuesto, han sido muchos más. Pero al menos esos, seguro.

Ha habido muchos días en los que, por la inercia, he corrido más: 15, 20 o 25 minutos. Sin esa voluntad inicial de correr diez se habrían quedado en nada.

Me he arrepentido muchas tardes de no haber corrido por la mañana, porque me da menos pereza.

En más de una ocasión, incluso correr 10 minutos se me ha hecho largo, y he tenido que dar una vuelta extra a la manzana.

Ninguno de esos 455 días he estado demasiado enfermo ni demasiado dolorido ni demasiado ocupado para no dedicarme esos diez minutos. ¿Tendrá algo que ver?

No soy mejor que tú. Inténtalo. Te saldrá bien.






1 comentario:

  1. Es sólo cuestión de empezar, y esos diez minutos se transformaran en muchos kms. No podrás dejar de hacerlo...mientras el cuerpo,lo,permita..Jeje

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