jueves, 16 de mayo de 2013

Día 13: la soledad del corredor de fondo

Km recorridos (día/total): 6/86                                             Vueltas dadas al perímetro (día/total): 3/43
 
Hoy, nuevamente por motivos laborales, he tenido que ajustar mi hora de carrera al inicio de mi jornada de trabajo. Es algo que en otro ámbito me habría costado trabajo, pero, sinceramente, aquí no me resulta tan difícil. Así, a las seis de la mañana han comenzado a cantar los grillos de mi iPhone, y me he puesto en marcha.
 
Como ha sido una hora un tanto anormal me ha tocado, al igual que el domingo pasado, correr solo. La temperatura era muy agradable, y soplaba una leve brisa del oeste, si mal no recuerdo, que seguramente a lo largo del día ha ido rolando hacia el sur. Es probable que, debido a ese cambio en la dirección del viento (durante las casi dos semanas anteriores ha soplado casi permanente el viento del norte proveniente de Turkmenistán), la temperatura se haya elevado unos cuantos grados.
 
A pesar de lo temprano de la hora, me he encontrado con muchos corredores, en su mayoría italianos, en sentido contrario al mío. Me imagino que, después de unas semanas más, el grupo se irá reduciendo y al final quedaremos los más habituales. Pero, como digo, hoy iban todos en sentido antihorario, así que me ha tocado verles venir de frente.
 
Estoy acostumbrado a correr solo, pero tal vez hoy me habría venido bien una compañía un poco más lenta, porque de otra manera las molestias seguirán increscendo, que no es lo que deseo. Suerte que, a media mañana, he conseguido un masaje de emergencia, y ahora me encuentro un poco mejor. Es probable que mañana ruede muy poco tiempo, el mínimo de diez minutos, y dedique un buen rato a estirar bien.
 
De momento hoy he podido disfrutar unos cuantos minutos de la soledad del corredor de fondo. No ha sido como el pasado domingo (está claro, un domingo a las cinco y cuarto de la mañana en Herat, Afganistán, no puede haber mucha gente corriendo), pero tampoco ha estado mal.
Por cierto, acabo de comprobar que estoy a 14 kilómetros de llegar a los 100 primeros. Si todo va bien, de aquí al domingo estará hecho. También me he dado cuenta de que, día a día, mañana hará dos semanas que empecé a correr en Afganistán. El tiempo pasa, a su ritmo. Yo corro, al mío. Imparable, como el tiempo.

2 comentarios:

  1. Me alegro que estés manteniendo tus salidas y que vayas acostumbrándote a tu nueva situación. Espero también que esas molestias remitan. Cuídate, amigo.

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  2. Qué casualidad!! Ayer estaba buscando esta película para verla!!

    A seguir así de bien!!

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