sábado, 22 de junio de 2013

Día 50: a estas horas me falta inspiración

Km recorridos (día/total): 6,6/256,4                                   Vueltas dadas al perímetro (día/total): 3/121
 
Otra vez se me ha hecho tardísimo, y hoy estoy verdaderamente cansado, con ganas de acostarme y desconectar de este sábado, uno más, uno menos, en tierras afganas. Seguro que mañana será otro día, espero que no tan ventoso y con tanto polvo en suspensión, aunque seguramente tan caluroso como el de hoy.
 
El día comenzó como de costumbre últimamente, con mis seis kilómetros y pico de rigor nuevamente en solitario, un poco más tarde de lo habitual (al ser sábado me lo podía permitir, claro). A las ocho el sol calentaba con fuerza, pero lo cierto es que los kilómetros pasan rápido y yo me voy acercando a los trescientos poco a poco.
 
Para ser sincero, hace unas semanas no lo habría creído, ya que por momentos pensé que tendría que dejar de correr durante un tiempo. Afortunadamente no ha sido así, y voy camino de los veinte meses seguidos corriendo al menos diez minutos al día. No son pocos días, después de todo. A decir verdad, he perdido la cuenta. Al final lo que importa es que cada día de los últimos casi 600 me he calzado unas zapatillas de deporte durante unos cuantos minutos.
 
A lo largo de esta semana han venido a mi mente algunas ideas que quiero poner en práctica inmediatamente después de volver a casa. Voy dándole forma a un pequeño proyecto dentro del Proyecto 101. De momento no puedo contar mucho más, pero van apareciendo personas así, como por arte de magia, que me aportan, en la mayoría de los casos de forma inconsciente, su granito de arena, y que van dando forma a algo que me ilusiona especialmente.
 
En ocasiones el día a día supone una pequeña (o gran, según el caso) tempestad emocional, acentuada por la lejanía y otros factores que no vienen a cuento. Yo he descubierto un sitio desde el que se puede contemplar el cielo en tranquilidad una vez ha anochecido. Después de terminar estas líneas, iré a sentarme allí un buen rato (¡espero que no esté ocupado!). A mirar el cielo. A contar estrellas.
 
Mañana no dejaré para tan tarde la entrada del blog. A estas horas, me sobra sueño y me falta inspiración. Espero que sepáis disculparme. A partir de las diez no soy persona. Al menos en un día como hoy. Tan cansado. Tan lejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario